La Medida del Exito

Rodrigo Del Campo

Llegar a un consenso sobre qué representa el éxito, qué significa ser exitoso o cómo medir el nivel de éxito de una persona es un tema desafiante e, incluso, controversial.

Es algo que ha tomado mucho tiempo a los filósofos, cada uno de nosotros puede tener una opinión distinta y también es muy probable que no estemos muy seguros de que la nuestra sea la más correcta.

Sin embargo, una perspectiva que conocí recientemente, a través de Michael Roderick (www.smallpondenterprises.com), me pareció interesante y muy útil.

La perspectiva de Michael es que, para medir qué tan exitosos estamos siendo, tenemos que analizar nuestro Índice TCD, es decir, qué tan contentos estamos con nuestro Tiempo disponible, qué tan satisfechos estamos con las Conexiones que tenemos con otras personas y qué tan felices estamos con nuestro Dinero disponible.

En cada una de estas variables, podemos darnos un puntaje, de 0 a 10 o un porcentaje y calcular nuestro Índice TCD.

Pero lo que me pareció más interesante de esta perspectiva es la interrelación que hay entre estas tres variables pues la solución a un déficit o puntaje bajo en alguna de ellas suele estar en las otras dos.

Por ejemplo, si no estamos contentos con el nivel de dinero que ganamos o hemos ahorrado, lo más probable es que la solución esté relacionada con cómo estamos utilizando nuestro tiempo y con quiénes estamos relacionándonos. Después de todo, como se suele decir, "nuestros resultados son equivalentes al promedio de los resultados de las 5 personas con quienes más interactuamos en nuestras vidas".

De la misma forma, si queremos tener más tiempo disponible, deberíamos analizar en qué estamos invirtiendo (o gastando) nuestro dinero y, especialmente, en qué personas estamos confiando para que nos liberen nuestro tiempo (por ejemplo, a través de delegarles tareas o proyectos). La construcción de un buen sistema de apoyo, tanto a nivel personal como profesional, es una de las mejores inversiones que podemos realizar.

Finalmente, si deseamos tener conexiones más fuertes o de mejor calidad, necesitamos entender cómo estamos utilizando nuestro dinero y dónde estamos invirtiendo nuestro tiempo. Construir una red potente de contactos toma tiempo, esfuerzo y requiere inversión de dinero.

Finalmente, como en muchas cosas, nuestro Índice TCD no es algo estático, sino que va variando de acuerdo a la situación y a nuestra etapa en la vida. Por ello, es un análisis que deberíamos realizar periódicamente y, lo que es más importante, tomar acciones para corregir los déficits, aunque implique decisiones difíciles.la-